Soy usuaria orgullosa de Pibella.
Viajo frecuentemente y me alegro cada vez que utilizo el tubito pipí. ¡Estando de vacaciones también es genial! Los aseos sucios ya no me importan. Este sistema urinario es el único que me permite tener puestos las bragas y los pantalones. Mi culito queda cubierto. Todo queda seco y puedo despojarme incluso de la última gota. El tubito simplemente se sacude y se mete otra vez en su bolsa. El sistema funciona perfectamente. ¡Muchas gracias por este invento fantástico!
Karina Y.