Quiero decirles las gracias por su ayuda cuando estaba en el hospital y había perdido mi Pibella. Estaba tan aliviada cuando llegó el paquete.
Dependo de una silla de ruedas y hay momentos cuando casi no estoy capaz moverme del todo. Ir al servio entonces es un gran problema y Pibella un gran alivio.
Sobre todo en el hospital cuando no podía levantarme de la cama Pibella era una estupenda ayuda. Mi vejiga es muy débil y necesito ir al servicio con frecuencia. Llamar cada vez a la enfermera me da vergüenza. Además tengo sobrepeso y con el urinario tradicional es casi imposible. Y luego es muy desagradable tener alguien a su lado esperando que una termine con sus necesidades. Con Pibella todo es mucho más fácil. La enfermera no conocía el sistema de Pibella pero podía quitar la bolsa contenedora sin problemas y yo podía hacer un poco de promoción para Pibella. Espero que en los hospitales se vaya a implementar cada vez más.
Muchas gracias por su ayuda.
Saludos amables
Mary Graph